~ Sadhana o Práctica Espiritual ~
Sadhana, es una palabra muy relevante dentro del pensamientos y la filosofía hindú. Es un término del antiguo y clásico idioma Sánscrito, que se encuentra imbuido con un profundo y vasto contenido de carácter místico y espiritual. Es un concepto de muy amplio espectro e implicaciones muy diversas, según sea el grado de entendimiento y comprensión que posea del mismo, cada cual. Literalmente, se puede entender como el proceso mediante el cual, a través del cultivo constante y metódico de la disciplina de la práctica espiritual, se puede llegar al desarrollo integral y equilibrado de los diversos aspectos de la personalidad del ser humano.
Y con ello a la vez, consecuentemente al logro de la elevación desde la ignorancia y estrechez del ser inferior, hacia la amplitud y trascendencia del Ser Superior. Vale decir, el emerger desde el mundo propio de las tinieblas de la ignorancia y la insensatez, hacia las regiones de la Luz Divina, la bella morada de la Realidad del Ser.
Por lo tanto, en su aspecto más refinado, finalmente es el proceso gradual y progresivo que nos puede conducir al elevado y maravilloso estado de la Iluminación. La meditación, la devoción, la oración sincera, el servicio desinteresado al prójimo, el uso adecuado de la ciencia del mantra, el estudio de las escrituras sagradas y el cultivo de las buenas compañías, en especial la cercanía de santos y sabios, se cuentan entre los instrumentos para avanzar inexorablemente en esa dirección. Así también, resultan de gran ayuda el abrazar el cultivo de los buenos hábitos y el desarrollo de las virtudes y los valores humanos tales como el Amor, la Paz, la Verdad, la Rectitud y la No Violencia.
Sin práctica espiritual, no hay progreso; así de claro, definitivo y simple. Es muy común ver a muchas personas que son muy grandilocuentes en cuanto a la prédica, pero muy escasos en cuanto a la práctica de lo que predican. Esta costumbre tan extendida y común, resulta absolutamente incongruente y carente de real valor en la esfera espiritual. Los ejemplos son incontables. El que quiera ser profeta, antes necesariamente tiene que ser moldeado y restaurado en el crisol del fuego transformador y trascendente y de la rigurosa y metódica práctica espiritual.
Para quien desee fervientemente avanzar en su proceso evolutivo, la práctica regular y disciplinada de su propio Sadhana, constituye en sí mismo la columna vertebral en que se sustenta el avance del progreso interno. Transfiriendo a la vez, un poder místico y transformador de incalculable poder psico-espiritual, el que gradualmente siempre se estará moviendo en forma ascendente hacia las esferas superiores. Finalmente, como dicen los maestros, “unas cuantas onzas de práctica son mucho mas valiosas y significativas que toneladas de teoría”.