La Paciencia en una herramienta fundamental en el largo y sinuoso camino del aprendizaje espiritual. Resulta muy fácil de comprobar que una persona que cultiva la paciencia es muy diferente en su naturaleza interna a una persona de temperamento impaciente.

 

Como sabiamente dice el refrán: «la paciencia en un momento de enojo, nos evitará cien días de dolor». Cuando la paciencia anida en nuestro corazón y nuestro espíritu todo se hace mas fácil, llevadero, sencillo y aceptable.

 

La paciencia, también está muy relacionada con el vivir en tiempo presente; puesto que no hay mejor tiempo que el tiempo presente. Del pasado solo debemos cargar sus lecciones y aprendizajes. Y, en cuanto al futuro, nada de que preocuparse si es que nos esforzamos en vivir un buen presente.

 

Si observamos con suficiente atención la vida o la biografía de cualquier maestro de cualquier época, tradición o linaje, veremos que la paciencia siempre constituyó en sí misma uno de los pilares o componentes mas importantes y esenciales dentro de sus bellas y luminosas enseñanzas.

 

~ Águila Blanca ~